

El Detergente Antimoho Ecológico Idroless acaba por completo con las manchas de moho y verdín que, con frecuencia, aparecen en las superficies afectadas de humedad.
Es una opción totalmente eficaz que consigue limpiezas profundas, sin necesidad de usar disolventes, por lo que es perfecto para interiores.
Además, tampoco incorpora cloro en su composición.
Es muy fácil de aplicar y, para una mayor facilidad, no requiere aclarado.
Características técnicas
Descripción
Si lo que se quiere es realizar una limpieza en profundidad de moho y verdín en techos y paredes, este detergente de Idroless, apto para interiores, es el fungicida indicado.
El Detergente Limpiador es un líquido concentrado, por lo que será suficiente con una pequeña cantidad de producto para obtener grandes resultados.
Una garrafa de 5 litros de Detergente Limpiador limpia entorno a unos 50m² en una superficie poco porosa.
Después de aplicarlo, las superficies tratadas mantendrán su aspecto original: sin adquirir brillos, capas superficiales o algún cambio de aspecto.
Este limpiador antimoho es perfecto para interiores porque no contiene disolventes en su composición, y por eso se puede utilizar en lugares con escasa ventilación. Por lo tanto, no es agresivo con las superficies tratadas ni resulta perjudicial para la salud de quien lo aplica. Además, no necesita aclarado.
El Detergente Limpiador penetra en profundidad en los materiales a través de sus poros y elimina desde el interior cualquier tipo de espora u organismo que se encuentre allí anclado. Por este motivo, impide que se vuelvan a reproducir.
Se recomienda realizar un tratamiento con limpiadores antimoho y antiverdín o fungicidas antes de realizar impermeabilizaciones, tratamientos de capilaridad, pintado de superficies...
Aplicar el Detergente Limpiador es muy sencillo. Simplemente, se deben seguir los siguientes pasos:
Si la superficie a limpiar fuese exterior se debe proteger, al menos durante 8 horas, de las posibles lluvias.
La mezcla no se puede conservar, por lo que se aconseja ir mezclando el producto en pequeñas cantidades, según se vaya a utilizar. Por ejemplo, 1 vaso de Detergente por 3 vasos de agua.